En ocasiones, puede haber alumnos o alumnas que se nieguen a participar en los grupos cooperativos porque no saben cómo contribuir al desarrollo del trabajo. El profesorado puede prevenir y resolver este problema mediante la asignación de roles en el aprendizaje cooperativo.

En este artículo te presentamos:

• Qué son los roles en el aprendizaje cooperativo.
• Los tipos de roles más frecuentes.
• Consejos para aplicarlos en tu aula.

¿Qué es un rol?

Los roles en el aprendizaje cooperativo indican las tareas a desempeñar por cada miembro del equipo.

Implantar el aprendizaje cooperativo en el aula implica utilizar estructuras que aseguren la participación de todo el alumnado y la interacción entre los miembros del grupo.

Beneficios de utilizar roles en el aprendizaje cooperativo

La asignación de roles presenta las siguientes ventajas:

• Reduce la probabilidad de que algunos alumnos o alumnas adopten una actitud pasiva o dominante en el grupo.
• Garantiza que el grupo utilice las técnicas grupales básicas y que todos los miembros aprendan las prácticas requeridas.
• Crea interdependencia positiva entre los miembros del grupo, es decir, los roles asignados son complementarios y están interconectados.

Tipos de roles en el aprendizaje cooperativo

Los roles utilizados habitualmente durante el aprendizaje cooperativo son los siguientes:

Secretario

• Piensa de manera analítica: ordena, verifica y corrige.
• Comprueba que todos hayan entendido las explicaciones.
• Registra el trabajo y ordena los materiales.
• Valora las ideas y hace preguntas para comprobar que son consistentes.
• Revisa los compromisos y las tareas pendientes.
• Verifica que el producto final reúne las contribuciones de cada miembro del equipo.

Portavoz

• Media entre el grupo y el profesorado encargado de hacer las preguntas sobre dudas o aspectos necesarios, responde ante el docente.
• Actúa en nombre del grupo.
• Conduce las discusiones.
• Sintetiza e integra el trabajo del grupo para transmitirlo al docente.
• Consigue material y recursos para el grupo.

Coordinador

• Organiza las actividades y distribuye las tareas.
• Da ideas y pone en práctica técnicas de brainstorming.  
• Amplía perspectivas, hace preguntas, busca información y genera respuestas más allá de la primera respuesta del grupo.
• Ofrece soporte y anima al grupo.
• Fomenta la participación de todos los miembros del grupo.
• Genera buen ambiente, se muestra optimista y media en los conflictos.

Controlador

• Observa y orienta el trabajo de manera global.
• Mantiene el orden y la limpieza entre sesiones de trabajo.
• Distribuye las tareas, comprueba que se cumplen los plazos.
• Supervisa el orden de los turnos de palabra, el tono de voz y vigila el nivel de ruido.
• Dirige la autoevaluación grupal.

Crítico

• Escucha las aportaciones de los críticos de otros grupos para mejorar su propio equipo.
• Analiza las relaciones interpersonales del equipo para evitar conflictos.
• Solventa los problemas que pueden surgir en el grupo.
• Valora cómo avanza el trabajo y promueve la consecución de los objetivos propuestos.

Consejos para aplicar los roles en el aula

David Johnson en 1994 describió las siguientes pautas para la implantación de los roles de aprendizaje cooperativo en el aula:

• Reunir al alumnado en pequeños grupos unas cuantas veces, sin asignarles roles, para que se acostumbres a trabajar juntos.
• Comenzar con la asignación de roles simples como lector, encargado del tiempo, realizador de registros…
• Realizar rotaciones para que todos los roles sean desempeñados por los miembros del equipo.
• Introducir periódicamente un nuevo rol, más complejo.
• Con el tiempo, definir los roles de cada uno y repartir las funciones más complicadas.

A la hora de explicar los roles al alumnado, el profesorado puede utilizar diferentes estrategias:

• Asociar los roles en el aprendizaje cooperativo a colores.
• Establecer paralelismos entre los roles y las posiciones en un equipo deportivo.
• También se puede hacer uso de personajes de series, libros o películas: Pocoyó. Patrulla Canina, las casas de Harry Potter.

En conclusión, el aprendizaje cooperativo facilita la inclusión del alumnado NEAE al ajustarse a los diferentes estilos y ritmos de aprendizaje. Asimismo, la incorporación de roles potencia las habilidades y capacidades de cada estudiante.